La bestia duerme, pero no para siempre

Después de retirarse del campo de batalla, Alex Clark regresa a casa, con la esperanza de pasar el resto de su vida con sus padres y ayudarlos a dirigir su restaurante. La vida se establece en un ritmo tranquilo y familiar, y sus padres comienzan a creer que los horrores de la guerra, la sangre, el dolor y el trauma, nunca más lo perseguirán. Pero sus días pacíficos son de corta duración. Cuando un grupo de matones amenaza su sustento, Alex se ve obligado a enfrentar la oscuridad dentro de él una vez más.