Una vez familiar, ahora un extraño

En un concierto hace siete años, la icónica cantante Carmen Rowe anunció su repentino retiro de la industria musical. Había encontrado al chico que había estado buscando. El niño, ahora conocido como Ben Lewis, era el director ejecutivo de Lewis Group y había perdido la vista en un accidente automovilístico. Carmen se hizo pasar por muda y se quedó a su lado. Bajo su meticuloso cuidado, Ben finalmente recuperó la visión después de quitarse las vendas. Sin embargo, en el momento en que pudo volver a ver, corrió directo hacia su primer amor, Carmela Taylor. Con el corazón roto por el rechazo a pesar de todo lo que había hecho, Carmen decidió divorciarse de Ben y regresar a la industria musical con su hija. Más tarde, Ben organizó un gran concierto de regreso de Carmela. Pero durante la actuación reconoció que la voz de Carmela no era la legendaria que recordaba. Sólo entonces se dio cuenta de la verdad. En ese momento, Carmen Rowe había recuperado por completo su estatus de diva de la música y no tenía intención de darle a Ben otra oportunidad.